BOLLOS PREÑAOS

O como se dice en Asturias, "bollus preñaus". Cuando era pequeña  e iba a casa de mi abuela siempre cocían el día de mi santo, el 27 de agosto y a los niños nos hacían estos bollos para merendar, recuerdo que nos los comíamos quemando, no podíamos esperar a que enfriaran, ella nos hacía unos bollos enormes con un chorizo entero dentro para cada uno, ademas le ponía un huevo dentro de la masa con cáscara y todo que se cocía en el horno. Nos costaba acabarlo pero era una merienda increíble.
Yo hoy he hecho unos poquitos para rememorar aquellos sabores, la pena es que no tengo chorizos del pueblo pero yo no le hago asco a ningún chorizo, así que me he conformado con unos que tenía para la barbacoa que también le quedan muy bien.

Ingredientes:

Para unos 15 bollos no muy grandes:

- 2 vasos de agua
- 1/2 sobre de levadura de panadero o 15 g. de la compacta de panadero
- sal
- 1 pizquita de azúcar para darle un toque dulce a la masa (es es algo que le hago yo, pero es opcional)
- 1 chorrito de aceite
- 600 g. de harina aproximadamente
- unos buenos chorizos para rellenar.

Elaboración:

Hacemos la masa como cada uno tenga costumbre, yo caliento el agua en el micro hasta que esté templadita, que no queme, la vuelco en un bol y disuelvo la levadura. Agregamos la sal y el azúcar, a continuación el aceite. Cuando tenemos todo bien mezclado vamos añadiendo la harina poco a poco según nos pida el líquido hasta conseguir una masa consistente. La cantidad de la harina es orientativa, le hemos de añadir poco a poco y así iremos viendo la que hemos de agregar. Dejamos la masa tapada con  un paño limpio hasta que doble su volumen, aproximadamente una hora.
Cogemos la masa y hacemos bolas del tamaño de una pelota de golf más o menos (esto depende del tamaño que le queramos dar a los bollos). Hacemos un circulo más o menos plano, colocamos en el centro un trozo de chorizo de unos 4 cm y cerramos con la mano haciendo bolas, como cuando hacíamos plastilina en el colegio. Colocamos las bolas en una bandeja de horno sobre un papel vegetal, tapamos con un trapo y volvemos a dejar que suban otro poco.
Introducimos en el horno precalentado a unos 180º y dejamos que se hagan, en mi horno han tardado unos 15 minutos con los fuegos de arriba y abajo encendidos y con el aire, pero cada horno es distinto.
Ya los tenemos listos. Si nos sobran se pueden congelar en una bolsa y nos quedarán muy buenos también.